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Miles de niños huyen solos de la violencia en Burundi

Más de 2.300 niños han huido de la violencia en Burundi sin sus padres, hacia los campos de refugiados, en las últimas seis semanas.

Desde finales de abril, miles de niños solos, sin sus familias, han hecho el camino durante una semana, la mayoría a pie, hasta los campos temporales de refugiados en Ruanda, Tanzania, República Democrática de Congo y Uganda.

Se espera que muchos más dejen Burundi por la violencia, que sigue en aumento de cara a las elecciones presidenciales, inicialmente previstas para finales de junio, pero aplazadas debido a las protestas y a la preocupación por la seguridad nacional.

Mary* huyó con su nieto Gedeon de 3 años. Dejaron su casa en Kanyosha, un suburbio que se encuentra a 26Km de la capital Bujumbura. La decisión de huir no la tomaron a la ligera, lo hicieron ante el miedo a ser atacados.

Muchas veces son los padres, desesperados, quienes les envían solos a los campos, ellos se quedan para proteger a sus familias y sus propiedades frente a los saqueos. El número de niños solos que están llegando a los campos no tiene precedentes. Estamos muy preocupados por el bienestar de los que se enfrentan a este peligroso viaje, especialmente cuando vemos niños tan pequeños llegando a los campos. Muchos llegan solo con la ropa que llevan puesta e incluso sin zapatos.

Aunque los niños lleguen a los campos, su seguridad no está garantizada. Muchos refugiados hablan de episodios de violencia, acoso e intimidación, presuntamente por parte de milicias locales.

Sin escuelas ni centros para jugar, muchos niños están trabajando, cogiendo leña o cavando letrinas en condiciones inseguras.

En el campo de Mahama, en Ruanda, también preocupa la falta de agua y refugio, con largas colas de hasta seis horas cada día para recoger los limitados suministros diarios. En Tanzania, las instalaciones sanitarias del campo de Nyarugusu, están saturadas debido a la cantidad de nuevas llegadas y el cierre de dos zonas debido a un brote de cólera. El número de consultas médicas diarias se ha duplicado desde la llegada de miles de refugiados de Burundi y la demanda de consultas prenatales se ha multiplicado por seis.

Nuestra respuesta

Estamos ampliando nuestras operaciones en Tanzania, Ruanda y República Democrática de Congo, donde los equipos están trabajando en los campos de refugiados, proporcionando comida y medios de vida a los refugiados más vulnerables, entre ellos los niños que han llegado solos o con hermanos y facilitando el acceso a servicios básicos.