"Rezo para que haya una tregua y dejen entrar comida antes de que muramos", pide una niña en uno de los espacios amigables para la infancia de Save the Children
Gaza, 29 de julio de 2025 – El número de niños y niñas menores de 5 años con desnutrición aguda atendidos en las clínicas de Save the Children en la Franja de Gaza se multiplicó por diez en cuatro meses, al tiempo que las muertes infantiles por inanición y la autoridad humanitaria a nivel mundial sobre crisis alimentarias advierte que se está desarrollando una hambruna en Gaza.
De los 3.533 niños y niñas evaluados por Save the Children por desnutrición durante la primera mitad de julio, 259 fueron ingresados para tratamiento (7%), en comparación con 28 (1%) en marzo. El número de niños y niñas ingresados para tratamiento en las dos primeras semanas de julio se acerca al total de todo junio, una tendencia que el personal de la organización en sus dos centros de atención primaria calificó de peligrosa y sin precedentes.
Más de cuatro de cada diez mujeres embarazadas y lactantes —el 43%— evaluadas en las clínicas de Save the Children en julio fueron diagnosticadas con desnutrición, casi el triple que en marzo, cuando el Gobierno de Israel impuso un bloqueo total a Gaza.
Estos datos coinciden con el último informe de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (IPC), que concluye que “el peor escenario de hambruna se está desarrollando actualmente en la Franja de Gaza”, con más de 70.000 casos de niños y niñas menores de cinco años y 17.000 casos de mujeres embarazadas y lactantes con desnutrición aguda en toda la Franja.
Hasta ahora, 147 personas, incluidos 88 niños y niñas, han muerto presuntamente por desnutrición e inanición desde octubre de 2023, según el Ministerio de Salud. Según la ONU, al menos 25 niños y niñas han muerto por desnutrición solo en julio.
El personal de Save the Children asegura que los niños y las niñas que asisten a sus espacios amigables para la infancia pasan hasta dos días sin comer y se desmayan por falta de energía. Las madres que acuden a las áreas de atención maternoinfantil llegan exhaustas y en urgente necesidad de ayuda.
Las familias están recurriendo a buscar comida en la basura. Un miembro del personal de Save the Children relató los deseos de los niños y las niñas que asisten a sus espacios: “Una niña dijo: ‘Rezo para que haya una tregua y dejen entrar comida antes de que muramos’.”
Las organizaciones humanitarias —incluida Save the Children— han lanzado una alerta urgente para que se ponga fin al bloqueo y se restablezca el flujo completo de alimentos, agua potable, suministros médicos y otra ayuda a través de los canales humanitarios existentes liderados por la ONU.
Ahmad Alhendawi, director Regional de Save the Children para Oriente Medio, Europa del Este y el Norte de África, afirma que la situación es dantesca: "Los niños y las niñas en Gaza están muriendo de hambre ante nuestros ojos. Estamos viendo tasas récord de desnutrición tras casi cinco meses de sitio total por parte del gobierno israelí a la entrada de ayuda. Esto es una hambruna infantil diseñada. Es inconcebible que los niños y las niñas se estén desmayando de hambre, consumiéndose ante nuestros ojos y deseando morir, mientras toneladas de alimentos y suministros nutricionales que podrían revertir esta crisis completamente provocada por el hombre esperan al otro lado de la frontera o incluso dentro de Gaza. Todas las pruebas disponibles indican que el Gobierno de Israel está utilizando el hambre como arma de guerra.
Según Alhendwi, “estos niños y niñas no morirán si se nos permite hacer nuestro trabajo. Podemos tratar la desnutrición. Pero sin suministros ni condiciones, estamos impotentes para salvar a los niños y las niñas de una condición que podemos prevenir. Toda una generación está al borde del abismo. Cada día sin acceso significa más muertes infantiles y más niños y niñas en riesgo de sufrir daños irreversibles que socavan fundamentalmente su futuro”.
El reciente anuncio de una supuesta ‘pausa’ para permitir un goteo de ayuda en Gaza puede ayudar, pero está muy lejos de lo necesario para alejar a los niños, las niñas y sus familias del borde de la muerte, según Save the Children.
“Nuestras clínicas están haciendo todo lo posible para tratar a los niños y las niñas que atendemos, pero la única forma de poner fin a esta hambruna masiva es mediante un alto el fuego definitivo y el restablecimiento de las condiciones para que el sistema humanitario funcione a plena escala y ritmo, como está preparado para hacerlo”, concluye Alhendwi.
Los niños y las niñas son siempre los más vulnerables a los impactos inmediatos y a largo plazo de las crisis alimentarias y, sin suficiente comida y el equilibrio nutricional adecuado, corren un alto riesgo de sufrir desnutrición aguda. La desnutrición puede causar retraso en el crecimiento, afectar el desarrollo mental y físico, y aumentar el riesgo de contraer enfermedades mortales.
Save the Children lleva décadas trabajando en Gaza. Gestiona dos centros de atención primaria en la Franja, proporcionando servicios esenciales a niños, niñas, madres y familias, incluyendo evaluación y tratamiento de la desnutrición. Está preparada para ampliar la ayuda vital junto a sus socios. Sus equipos distribuyen agua, gestionan espacios amigables para la infancia y áreas maternoinfantiles donde las mujeres embarazadas y lactantes reciben apoyo nutricional, orientación sobre alimentación infantil y atención psicosocial. También han establecido centros de aprendizaje temporales para que los niños puedan continuar su educación.