350.000 niños viven atrapados en el oeste de Mosul en la etapa más peligrosa de la ofensiva de la ciudad

Mahmoud, médico en el este de Mosul, explica la situación en la ciudad: Audio y transcripción AQUÍ

Madrid, 30 de enero de 2017. Más de 350.000 niños están atrapados bajo el fuego cruzado en el oeste de Mosul, zona que sigue bajo el control del Estado Islámico. Si los civiles tratan de huir corren el riesgo de morir en ejecuciones sumarias. En los últimos días las fuerzas iraquíes y de la coalición siguen avanzando en su ofensiva para recuperar la zona oeste de la ciudad.
 
Save the Children advierte de que los niños que siguen en los distritos occidentales de la ciudad están en riesgo de sufrir los efectos devastadores de la artillería y de las armas explosivas. La organización hace un llamamiento a las fuerzas iraquíes y a sus aliados, incluidos Estados Unidos y Reino Unido, para que tomen todas las precauciones posibles para minimizar el riesgo para la población civil y garanticen el acceso a rutas seguras para poder huir de la ciudad.
 
Más de tres meses después del inicio de la ofensiva de Mosul, la crisis humanitaria en el interior de las zonas occidentales de la ciudad es cada vez más desesperante. Se estima que unos 750.000 civiles, casi la mitad de ellos niños, están fuera del alcance de la ayuda de las organizaciones humanitarias y están quedándose sin alimentos, agua y suministros básicos como pañales para bebés.
 
Las rutas comerciales hacia el oeste de Mosul están cortadas desde hace meses y los puentes de las zonas recién recuperadas del este que conectan con los distritos del oeste han sido destruidos. Actualmente no existen rutas seguras para los residentes de las zonas de la ciudad que siguen bajo el control del Estado Islámico.
 
Mahmoud, médico que se encuentra al este de Mosul, explica a Save the Children: "Hablé con mi familia que está en el oeste de Mosul, están atrapados y no tienen nada para comer o beber. No hay nada para los niños, no hay comida o leche para bebés, los mercados están vacíos y los suministros que almacenaban casi se han agotado”. "El peligro para los que tratan de huir es enorme. Si el Estado Islámico ve a una familia intentando escapar, les mata en el acto. Intenté traer los míos llegando a un acuerdo con un traficante para sacarlos de allí, pero hasta él mismo se negó a hacerlo tras ver morir a una familia de nueve personas que intentaba huir”, añade.

Maurizio Crivallero, director de Save the Children en Irak, denuncia: "Los niños están atrapados sin posibilidad de escapar. Hasta ahora, casi la mitad de las víctimas mortales en este conflicto han sido civiles. Para un niño no importa de dónde vienen las bombas, lo que importa es dónde aterrizan. Ahora mismo, cientos de miles de niños sigue atrapados en el oeste de Mosul en una situación que cada día se vuelve más peligrosa", explica Crivallero.
 
Save the Children está proporcionando ayuda psicológica de emergencia a los niños que han podido de escapar de Mosul y de otras zonas controladas por el Estado Islámico. La organización también proporciona suministros de emergencia y restaura los servicios educativos y sanitarios en las zonas recién recuperadas al sur de la ciudad, como en la zona de Hammam al-Alil que se encuentra a unos 25 kilómetros al sur de Mosul.

Sobre Save the Children

Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja en más de 120 países salvando vidas, proporcionando seguridad y protección a los niños y las niñas y defendiendo sus derechos en el marco de la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas.

En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias para que la situación económica o de exclusión social en la que viven los niños no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.