Casi siete millones de niños y niñas desplazados afrontan la dureza del invierno

Fotografías para medios de comunicación: https://bit.ly/39c4vAn 

Londres, 27 de diciembre de 2019. Un nuevo análisis elaborado por Save the Children revela que aproximadamente 6,9 millones de niños y niñas que se han visto obligados a abandonar sus hogares en partes de Europa, Oriente Medio y Asia están en riesgo de sufrir un duro invierno en lugares donde las temperaturas van a ser inferiores a los 0°C.

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© Elena Heatherwick / Save the Children

Save the Children identificó doce países que acogen a un gran número de niños y niñas desplazados y donde las temperaturas invernales son muy duras, como Afganistán, Bosnia Herzegovina, Irak, Jordania, Montenegro, Siria, Turquía o Ucrania. La organización asegura que muchos de ellos se verán obligados a afrontar el intenso frío en carpas rudimentarias, refugios inadecuados o incluso a la intemperie. En los peores casos, y sin un apoyo urgente, estas condiciones pueden ser mortales.

Más de 28.000 personas refugiadas y migrantes han llegado a Bosnia Herzegovina este año y más de 8.000 permanecen actualmente en el país, que ya ha recibido las primeras nevadas. Muchas de ellas, incluidos niños y niñas, han tenido que cobijarse en edificios en desuso y queman plásticos para calentarse, o se encuentran en contenedores al descubierto.

Jakey, de 15 años, huyó sola de la persecución de los talibanes en Afganistán. Ahora vive en un contenedor en una antigua fábrica que carece de luz natural y calefacción adecuada. "El camino durante mi viaje fue difícil, estaba nevando ... Hacía mucho frío. Vi que dos personas habían muerto a causa del frío", cuenta.

En Bosnia Herzegovina, Save the Children ha ayudado recientemente a evacuar un asentamiento en una zona forestal que había servido con anterioridad para tirar basura. Las condiciones eran inhumanas, todo estaba helado y cubierto de nieve. La organización asegura que bajo ninguna consideración era un sitio seguro para la infancia.

“Millones de niños y niñas han huido de conflictos o disturbios en busca de seguridad. Sin embargo, para algunos, el duro invierno podría ser tan peligroso como las amenazas que dejaron atrás. Hace un año, en cuestión de semanas, las heladas temperaturas y las duras condiciones en Siria mataron a 15 niños y niñas que habían huido del conflicto”, asegura David del Campo, director de Cooperación Internacional y Acción Humanitaria de Save the Children. 

“Lonas o láminas de plástico de pocos milímetros de grosor, o paredes desmoronadas de edificios abandonados, son todo lo que separan a niños y niñas asustados y exhaustos del frío mientras las temperaturas siguen cayendo”, añade del Campo.

En Siria 2,6 millones de niños y niñas siguen desplazados tras casi nueve años de intenso conflicto. Las condiciones varían, pero incluso antes de la reciente escalada de combates en el norte del país, el 14% de estas familias se vieron obligadas a vivir en 'sitios de último recurso': campamentos sobrecargados y otros refugios similares, muchos sin electricidad, donde es casi imposible que los niños y las niñas estén seguros y protegidos del frío. 

En Ucrania la mayoría de los más de 330.000 niños y niñas forzados a abandonar sus hogares por conflictos en el este del país se encuentran en alojamientos alquilados. Sin embargo, el ingreso promedio de una familia desplazada es la mitad del promedio nacional y no es suficiente para cubrir ni las necesidades básicas. La mitad de los desplazados en pequeñas localidades aseguran que no pueden calentar sus hogares mínimamente, y las temperaturas ya han descendido muy por debajo de los 0°C.

En Afganistán, tras 18 años de guerra, las familias desplazadas a menudo viven en casas hechas de tierra, sin electricidad, y luchan por conseguir ropa de abrigo o incluso zapatos para sus hijos e hijas. Muchas personas queman plástico y madera para calentar una habitación donde las familias comparten una colcha para evitar temperaturas que ya han alcanzado al menos -5°C este invierno y podrían bajar aún más.

Los inviernos duros y las inadecuadas condiciones de alojamiento pueden ser mortales. Cuando las personas refugiadas, desplazadas y migrantes duermen al aire libre o en lugares fríos se exponen a la hipotermia, la congelación y a otras condiciones adversas para su salud. Varios estudios han demostrado que la exposición al frío y el alojamiento inadecuado pueden aumentar las tasas de neumonía, el mayor causante infeccioso de muertes en el mundo de niños y niñas menores de cinco años. 

En condiciones extremadamente frías, los niños y las niñas pequeños corren un mayor riesgo de hipotermia porque no pueden regular su temperatura corporal al igual que las personas adultas. La hipotermia comienza con temblores y somnolencia antes de que, en casos severos, los temblores se detengan y la frecuencia cardíaca disminuya. Los recién nacidos están particularmente en riesgo debido a su gran área de superficie corporal, una pequeña cantidad de grasa debajo de la piel y la disminución de la capacidad de temblar.

El frío también conduce a otros peligros. Las personas refugiadas a menudo se ven obligadas a usar estufas o calentadores de queroseno dentro de carpas u otros alojamientos que pueden provocar incendios mortales. Los humos pueden conducir a enfermedades respiratorias. Mientras tanto, la humedad constante provoca afecciones y erupciones cutáneas.

Save the Children proporciona una variedad de apoyo vital para ayudar a los niños, las niñas y sus familias desplazados a pasar el invierno. En Bosnia Herzegovina, la organización reparte mantas y trabaja para que los niños y las niñas vulnerables se alojen en lugares seguros y cálidos. En Afganistán, distribuye ropa de abrigo y dinero en efectivo a las familias para ayudarles a comprar ropa, alimentos y otros suministros para el invierno. En Siria, distribuye artículos de higiene, cestas de alimentos y otros artículos que cubren las necesidades básicas, mientras trabaja para mejorar las condiciones de vida de los niños y las niñas recientemente desplazados por los combates.

Sobre Save the Children

Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja desde hace 100 años para asegurar que todos los niños y niñas sobreviven, aprenden y están protegidos. Actualmente la organización opera en más de 120 países.

En España trabaja en programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. La organización atiende además a la infancia migrante y está centrada a proteger a los menores frente a la violencia. Save the Children quiere que todos los niños y niñas, independientemente de su condición o país de origen, puedan disfrutar plenamente de sus derechos y alcanzar el máximo de sus capacidades.