Gaza: El asedio al combustible podría cortar en cuestión de días el suministro de agua potable a unos 44.000 niños y niñas apoyados por Save the Children

Gaza, 9 de julio de 2025 – La escasez de combustible en Gaza podría cortar el suministro de agua potable a unos 44.000 niños y niñas apoyados por Save the Children en cuestión de días, aumentando el riesgo de enfermedades transmitidas por el agua como el cólera, la diarrea y la disentería. Estos niños y niñas representan solo una pequeña parte de los afectados por la falta de combustible.

Save the Children depende del combustible para transportar agua segura y limpia diariamente a más de 50 comunidades en toda la Franja de Gaza, incluyendo a unos 44.072 niños y niñas. Sin embargo, el suministro de combustible ha sido completamente restringido desde que las autoridades israelíes impusieron un asedio total el 2 de marzo, poniendo en riesgo toda la respuesta humanitaria.

El acceso al agua segura es un derecho humano fundamental, crucial no solo para beber, sino también para prevenir enfermedades que se propagan ampliamente en Gaza, donde casi toda la población vive ahora en refugios y tiendas de campaña abarrotados tras haber sido desplazada múltiples veces. Según la ONU, la diarrea acuosa aguda —una de las principales causas de muerte infantil en el mundo— está presente en el 39% de las personas que buscan atención médica, y la desnutrición es generalizada.

Save the Children asegura que es fundamental —y obligatorio según el Derecho Internacional Humanitario— que las autoridades israelíes levanten completamente el asedio al combustible y la ayuda humanitaria, en paralelo a las actuales conversaciones de alto el fuego, y que el acceso humanitario —y las vidas de los niños y las niñas— no se utilicen como moneda de cambio en las negociaciones.

Otras organizaciones humanitarias también han dado la voz de alarma sobre sus operaciones, ya que el agotamiento del combustible afecta el suministro de agua, el saneamiento y las pocas instalaciones de salud que aún funcionan. La ONU advierte que cientos de recién nacidos en incubadoras corren un riesgo inminente de muerte en cuestión de días si se corta la electricidad.

Ahmad Alhendawi, director regional de Save the Children para Oriente Próximo, Europa del Este y el Norte de África, afirma que "no solo se está reteniendo comida y ayuda a toda una población al borde del colapso, sino que el combustible que alimenta los sistemas críticos para la supervivencia no ha sido permitido desde hace cuatro meses. Esta falta de combustible representa una amenaza grave para toda la respuesta humanitaria en Gaza".

Save the Children está presente en Gaza, como lo ha estado durante décadas, lista para entregar ayuda vital junto a sus socios. Sus equipos proporcionan agua potable, gestionan espacios amigables para la infancia que ofrecen lugares seguros para jugar y recibir apoyo psicosocial, y establecen centros de aprendizaje temporales para ayudar a los niños a continuar su educación durante la crisis. Esta ONG también gestiona un centro de atención primaria en Deir Al-Balah, que brinda servicios esenciales a niños, niñas, madres y familias, incluyendo detección y tratamiento de la desnutrición.