Niños y niñas de tan sólo nueve años sufren violencia sexual y mutilaciones masivas en la República Democrática del Congo

Kinshasa, 8 de marzo de 2024 – Save the Children ha informado que mujeres, niñas y niños que huyen de la violencia en el este de la República Democrática del Congo (RDC) han denunciado haber sobrevivido a terribles ataques sexuales y mutilaciones genitales a manos de hombres armados que utilizan ramas de árboles, pistolas y cuchillos.   

El equipo de psicólogos y psicólogas de las organizaciones locales de Save the Children en los campos de desplazados de Kivu Norte han documentado actos masivos de violencia sexual contra niños y niñas de tan sólo nueve años. Los equipos tratan casi a diario a supervivientes que se enfrentan a embarazos no deseados, complicaciones de salud, estigmatización y pensamientos suicidas.   

La mayoría de los casos de violencia sexual en Kivu Norte se producen cuando los supervivientes huyen de la escalada de los combates entre el ejército de la República Democrática del Congo, el M23 y muchos otros grupos armados, que ha obligado a más de 250.000 personas, entre ellas unos 130.000 niños y niñas, a abandonar sus hogares. 

Elvis, psicóloga clínica de la organización Heal Africa, colaboradora de Save the Children, ha hablado de las horribles agresiones sexuales que ha tratado: "Lo que más me duele es la gravedad de las atrocidades que se cometen. Algunas supervivientes nos cuentan que varios hombres las violaron al mismo tiempo y que utilizaron objetos contra ellas, como cuchillos, ramas de árboles y pistolas. Otras han sido violadas en numerosas ocasiones”. Elvis ha explicado que estas niñas se quedan con embarazos no deseados y de muy alto riesgo, que incluso, algunas supervivientes, al no querer soportarlo más, tienen el impulso de suicidarse. “Yo trabajo con la superviviente, para que sepa que lo que le ha pasado no es culpa suya. Establezco conjuntamente con la persona o sus familiares un plan de seguridad para reducir el riesgo de suicidio”, ha declarado la psicóloga.  

El mes pasado, dos centros de salud apoyados por Save the Children en Kivu Norte fueron saqueados. Ambas instalaciones ayudan a proporcionar atención médica desesperadamente necesaria a los supervivientes de la violencia sexual y de género.   

La actual oleada de violencia se produce tras un tumultuoso año de recrudecimiento del conflicto en Kivu Norte en 2023, cuando la intensificación de los combates en el este del país desplazó a más de un millón de personas, entre ellas al menos 500.000 niños y niñas.  

Save the Children ha documentado más de 800 casos de violencia sexual y de género en las tres provincias afectadas por el conflicto: Ituri, Kivu Norte y Kivu Sur. Es probable que estas estadísticas sean una subestimación significativa del número real de casos, ya que la violencia sexual a menudo no se denuncia debido al estigma y al miedo.  

Florence (nombre ficticio), de 15 años, fue sometida a actos de violencia sexual por dos hombres mientras huía de su casa: "Uno de ellos me cogió por la fuerza, me estranguló y [me] violó uno tras otro. Me estranguló tanto que ya no tenía fuerzas para gritar. Luego se marcharon. Tenía miedo y vergüenza de contar esta historia a la pareja que me había acogido en su casa: eran amigos de mis padres, e incluso cuando llegué a casa de mi madre [no pude decir nada]".  

Florence ha contado que sólo se sintió cómoda para hablar de su experiencia después de asistir a una actividad de sensibilización sobre los abusos y la violencia contra las mujeres y las niñas que Save the Children organizó en el campo de desplazados. "Cuando conté al equipo de Save the Children que me habían violado hace unas semanas, me llevaron rápidamente al hospital, y allí la enfermera me dijo que estaba embarazada", dijo Florence. Su mayor deseo es ver, algún día, "a mis agresores ante los jueces y ser condenados".   

Save the Children y las organizaciones locales apoyan a las supervivientes de agresiones sexuales, como Florence en la República Democrática del Congo, mediante apoyo psicosocial y de salud mental, derivaciones a hospitales y especialistas, organización de grupos de apoyo en los que las supervivientes pueden compartir sus experiencias y organización de actividades de sensibilización sobre los derechos de los niños y niñas frente a los abusos. La organización también proporciona a las supervivientes información sobre apoyo y atención médica para ayudarlas a prevenir el VIH/sida, las infecciones de transmisión sexual y los embarazos no deseados, y cómo hacer frente a los problemas psicólogos. 

En muchos conflictos, la violencia sexual sigue utilizándose como arma de guerra para aterrorizar a mujeres y niños y niñas. Save the Children pide que se ponga fin de inmediato a la impunidad de la violencia sexual contra los niños y niñas reforzando las leyes y haciéndolas cumplir, al mismo tiempo que se exige responsabilidades a los autores. La organización en defensa de los derechos de la infancia también reclama una mayor inversión para reforzar y coordinar mejor la recopilación de datos sobre violencia sexual y garantizar que los supervivientes tengan acceso a servicios sanitarios y básicos que les ayuden en su largo camino hacia la recuperación.  

Save the Children en República Democrática del Congo 

Save the Children trabaja en la República Democrática del Congo desde 1994 para atender las necesidades humanitarias. La organización ha ampliado su respuesta humanitaria para apoyar los sistemas de atención existentes, formando a los líderes locales y a las comunidades para prevenir y responder a la explotación y los abusos y garantizando el acceso a la atención sanitaria a través de clínicas móviles.