Save the Children alerta de que 60 niños y niñas han sido asesinados desde 2013 a causa de la violencia de género

16 de abril de 2024. Con motivo de la reunión del pleno del Observatorio Estatal de Violencia sobre la Mujer, que tiene lugar hoy y que presidirá el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Save the Children alerta de que 60 niños y niñas han sido asesinados desde 2013 a causa de la violencia de género, según el Ministerio de Igualdad, y recuerda que la violencia de género es también una forma de violencia contra la infancia

En lo que va de año la cifra de niños y niñas asesinados por este tipo de violencia asciende a siete, lo que supone un aumento respecto a las cifras de los últimos años, ya que tanto en 2022 como en 2023 fueron dos los menores de edad asesinados a causa de la violencia de género. 

En lo que respecta a niños y niñas que se han quedado huérfanos a causa de la violencia de género, son ya 443 los menores de edad que se han quedado sin su madre como consecuencia de este tipo de violencia, 10 en estos primeros meses de 2024.  

“En los casos de violencia de género muchas veces los niños y las niñas pasan a un segundo plano, cuando son también víctimas directas de este tipo de violencia. Es nuestra obligación como sociedad garantizar su protección”, señala Catalina Perazzo, directora de Incidencia Social y Política de Save the Children.   

Medidas efectivas 

Save the Children recuerda que España cuenta con la Ley Orgánica de Protección a la Infancia y Adolescencia frente a la Violencia (LOPIVI), aprobada hace ahora tres años, que ya recoge las consideraciones sobre la violencia de género y su impacto en niños, niñas y adolescentes, a quienes la ley reconoce como víctimas de violencia de género, y contempla diversas medidas para su protección.  

Así, establece que las administraciones públicas deben prestar especial atención a la protección del interés superior de los niños, niñas y adolescentes que conviven en entornos familiares marcados por la violencia de género, garantizando la detección de estos casos y su respuesta específica, asegurando la plena protección de sus derechos. 

Además, señala que las actuaciones de las administraciones públicas deben producirse de una forma integral, contemplando conjuntamente la recuperación de la persona menor de edad y de la madre víctimas. Concretamente, garantizar el apoyo necesario para que las niñas, niños y adolescentes, de cara a su protección, atención especializada y recuperación, permanezcan con la madre, salvo si ello es contrario a su interés superior. 

“Es fundamental que estas medidas se implementen de forma efectiva, incluyendo la suspensión de la custodia compartida y del régimen de visitas en los casos en los que el niño o niña haya presenciado o sufrido violencia de género. Si no, el niño o la niña puede seguir en peligro. Un maltratador nunca puede ser un buen padre”, afirma Perazzo.  

Save the Children apuesta también por incorporar un enfoque de infancia a las políticas públicas sobre violencia de género, y garantizar que en las decisiones sobre las medidas de protección prime siempre la consideración sobre la seguridad del niño o niña.  

“Desde Save the Children seguimos con consternación estos últimos casos de menores de edad asesinados a causa de la violencia de género. Esperamos que esta reunión del Observatorio Estatal de Violencia sobre la Mujer sirva para volver a poner el foco en la infancia. A los niños y niñas les va la vida en ello”, concluye Perazzo.  

Sobre Save the Children 

Save the Children es la organización independiente líder en la promoción y defensa de los derechos de niñas, niños y adolescentes. Trabaja en 115 países atendiendo situaciones de emergencia y programas de desarrollo. Ayuda a los niños y niñas a lograr una infancia saludable y segura.  

En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias para que la situación económica o de exclusión social en la que viven los niños no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.