Save the Children alerta de que la violencia en el ámbito familiar es una de las principales causas que obliga a las niñas a abandonar sus países de origen

Madrid, 7 de octubre de 2020 - La violencia, el hambre o la inseguridad son algunos de los principales factores que obligan a las niñas a abandonar sus países de origen en busca de una vida mejor, según un nuevo estudio de Save the Children con motivo de la celebración, el próximo 11 de octubre, del Día Internacional de la Niña. El estudio 'Niñas en movimiento' analiza la situación de niñas y adolescentes, entre 7 y 23 años en tránsito en diferentes contextos de Europa, el sur de África y América Latina. De los 79,5 millones de personas desplazadas que se estiman en el mundo, 31 millones son niños y niñas.

A pesar de los diferentes contextos, todas las historias de estas niñas están marcadas por graves violaciones de sus derechos. "Mi padre era muy violento. Golpeaba y amenazaba a mi madre, también a mí. Decidimos salir porque amenazó a mi madre con matarla si regresaba” cuenta Jessyca (nombre ficticio) que con tan solo 9 años dejó Honduras junto a su madre debido a la violencia intrafamiliar. En el caso de Guatemala, Honduras y El Salvador, la mayoría migran debido a la violencia y a las condiciones de pobreza que viven en sus países. “Muchas niñas viajan con el apoyo financiero y emocional de sus padres, familiares o miembros de la comunidad que residen en otros países, aunque ese apoyo a menudo es insuficiente para proteger a las niñas frente una multitud de riesgos”, señala Victoria Ward, Directora Regional de Save the Children para América Latina y El Caribe. 

Muchas niñas comienzan su viaje después de un incidente violento en sus hogares sin saber que en el tránsito se encontrarán en muchos casos con los mismos riesgos de los que huyen: abusos y explotación sexual. Durante el tránsito viven además momentos de crisis, ansiedad, insomnio y otros trastornos de salud mental. “Las niñas y adolescentes que migran se enfrentan a mayores riesgos de violencia, incluyendo la violencia sexual, el embarazo no deseado y la explotación laboral. Muchas veces estos peligros se mantienen en el país de destino donde las necesidades económicas limitan sus oportunidades de educación y desarrollo”, asegura Ward. 

En el caso de Venezuela se estima que más de 5 millones de personas han salido del país. Como parte del estudio elaborado por Save the Children las niñas entrevistadas mencionaron la experiencia común del hambre, la falta de servicios y la situación política como motivo de la migración. “Nos fuimos debido a cómo están las cosas (…) solo comíamos a la hora de la cena”, comenta Alejandra (nombre ficticio) de 13 años, una adolescente venezolana que ahora vive en Colombia. En su país de origen, el 28% de las niñas y mujeres embarazadas padecen desnutrición aguda. 

A pesar de estas complejas situaciones, el análisis de Save the Children destaca la gran valentía y determinación de todas ellas por dejar atrás su papel de víctimas y luchar por su futuro. Como resultado de la investigación, Save the Children hace un llamamiento a los organismos internacionales, a la sociedad civil y a otros actores clave a invertir en la atención a niñas y adolescentes en tránsito desde el origen hasta el destino, proveer espacios seguros y de apoyo psicosocial, asegurando una atención y cuidado adecuados, e incidir para que los Estados incluyan un enfoque de género e infancia en sus políticas migratorias y en los sistemas de acogida. 

Save the Children apoya a las niñas desde el origen, durante el tránsito y en los países de destino. Con esta serie de investigaciones, Save the Children quiere escuchar y aprender de ellas para fortalecer aún más el trabajo adaptando las intervenciones a sus realidades y necesidades.

Sobre Save the Children

Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja desde hace más de 100 años para asegurar que todos los niños y niñas sobreviven, aprenden y están protegidos. Actualmente la organización opera en más de 120 países.

En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias para que la situación económica o de exclusión social en la que viven los niños no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.