Madrid, 9 de septiembre de 2020. Con motivo del Día Internacional para la Protección de la Educación de Ataques, Save the Children reclama al Gobierno que mantenga su liderazgo a nivel global en la protección de la educación en zonas de conflicto y que coopere con otros países, especialmente los del Sahel, en la promoción e implementación de la Declaración de Escuelas Seguras. La ONG insiste en la importancia de que estos Estados reconozcan los peligros que afectan a la educación y mejoren la protección de la infancia, y señala que solo en Burkina Faso y Níger los ataques contra la educación por parte de distintos grupos armados han supuesto el cierre de más de 2.000 escuelas en los últimos cinco años.
Save the Children explica que, en todo el Sahel, el número de escuelas obligadas a cerrar por culpa de los ataques se ha multiplicado por seis desde 2017. La organización declara que el aumento de la inseguridad en la región ha provocado un incremento de la violencia contra los civiles y una crisis de desplazados sin precedentes. Se estima que desde principios de 2019 más de 670.000 niños y niñas de toda la región han tenido que huir de sus hogares por culpa de la violencia y la inseguridad, lo que también dificulta su acceso a la educación.
La ONG recuerda que la Coalición Global para Proteger a la Educación de Ataques (GCPEA), de la que forma parte, ya advirtió en el informe Education under Attack 2020 que en todo el mundo ha habido un aumento significativo de los ataques contra la educación en los últimos años. Entre 2015 y 2019, se produjeron más de 11.000 ataques a instalaciones educativas, profesores y estudiantes en 93 países, en los cuales más de 22.000 niños, niñas y maestros resultaron heridos o asesinados en ataques a la educación.
Save the Children destaca que actualmente hay 415 millones de niños y niñas viviendo en zonas de conflicto y advierte de que incluso en plena alerta sanitaria por la Covid-19 los ataques a la infancia y a la educación no han cesado. Por ello, la organización también considera fundamental que los líderes políticos se comprometan a priorizar y aumentar la inversión destinada a la educación en estos países, incluidas aquellas partidas destinadas a la protección de la infancia y a la reconstrucción de las escuelas.
“La educación es un derecho fundamental y debe protegerse en todo momento, incluso durante los conflictos armados o la pandemia del coronavirus”, señala Catalina Perazzo, directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de Save the Children. “Los gobiernos deben desarrollar planes para prevenir y responder a los ataques contra la educación, reforzar el monitoreo y las denuncias de los actos violentos contra la infancia y, en última instancia, llevar a los responsables de estos ataques ante la justicia,”, añade.
Save the Children también apunta al posible impacto de la pandemia en los ataques a la educación. En algunos contextos, los bloqueos por la Covid-19 y las restricciones de movimiento han permitido que los grupos armados aumenten su control sobre territorios donde el gobierno y las organizaciones humanitarias no tienen acceso. En otros, se ha acordado un alto el fuego. Y en otras áreas, donde las escuelas han reabierto, los ataques a la educación han aumentado de inmediato, como en Malí, donde solo en junio de 2020 se reportaron 27 ataques a la educación y 500 amenazas a maestros y escuelas.
“A las instalaciones educativas destruidas y al temor de la infancia, las familias y el profesorado a la violencia de los grupos armados hay que sumar las restricciones de movimiento y miedo al contagio del coronavirus. En un momento en el que millones de niños y niñas regresan a las aulas después del verano no podemos olvidar que otros muchos se están quedando fuera del sistema educativo por culpa de la violencia o la pandemia”, explica Perazzo.
En contextos donde la educación está siendo atacada, Save the Children mantiene el programa Escuelas Seguras para apoyar a la infancia, las comunidades y los gobiernos, y garantizar el derecho de los niños y las niñas a aprender y estar protegidos. El programa educativo de la ONG también tiene en cuenta la protección de la infancia dentro y fuera del entorno escolar para garantizar su protección frente al abuso, el maltrato, el secuestro o la violación. En estos momentos también se están tomando medidas específicas para frenar la Covid-19 como el lavado de manos o las campañas informativas. En este sentido, Save the Children lidera a nivel global la redacción de una Guía Institucional de Regreso Seguro a la Escuela para apoyar a los actores de la educación, la salud y la protección en la vuelta a las aulas en un contexto de alerta sanitaria por coronavirus.
Sobre Save the Children
Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja desde hace 100 años para asegurar que todos los niños y niñas sobreviven, aprenden y están protegidos. Actualmente la organización opera en más de 120 países.
En España trabaja en programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. La organización atiende además a la infancia migrante y está centrada a proteger a los menores frente a la violencia. Save the Children quiere que todos los niños y niñas, independientemente de su condición o país de origen, puedan disfrutar plenamente de sus derechos y alcanzar el máximo de sus capacidades.