Sobrevivir en Turquía y Siria un mes después de los terremotos

  • Los terremotos que sacudieron la región los días 6 y 20 de febrero afectaron a 24,4 millones de personas, entre ellas 6,2 millones de niños y niñas 

  • Miles de familias siguen viviendo en refugios provisionales y luchando por conseguir alimentos y otros bienes esenciales, mientras lidian con las pesadillas nocturnas y los miedos de sus hijos 

  • En Turquía aumentan las personas desplazadas y los campamentos de refugiados están superpoblados. Siria vive una crisis dentro de otra crisis tras 12 años de conflicto y zozobra económica

Dina y Ahmad con su padre Lutfi, que se recupera de sus heridas. ©Khalil Ashawi/Save the Children.
Dina y Ahmad con su padre Lutfi, que se recupera de sus heridas. ©Khalil Ashawi/Save the Children.

 

Recursos para medios: https://www.contenthubsavethechildren.org/Package/2O4C2SX4XBR7 

Ammán, 6 de marzo de 2023 - Un mes después de los devastadores terremotos que causaron más de 50.000 muertos y más de 100.000 heridos en Siria y Turquía, miles de familias siguen viviendo en refugios provisionales y luchando por acceder a alimentos y otros bienes esenciales.   

Los terremotos que sacudieron la región los días 6 y 20 de febrero afectaron a 24,4 millones de personas, entre ellas 6,2 millones de niños y niñas, y provocaron nuevos desplazamientos, con una serie de réplicas que agravaron aún más las necesidades de las comunidades afectadas.  

Amani, de 26 años, y su familia de cuatro miembros perdieron su casa en la gobernación regional de Alepo, en Siria. Amani utilizó su cuerpo para proteger a su hijo Ahmad, de 12 años. Estuvo atrapada con su marido y sus dos hijos bajo los escombros durante cuatro horas hasta que fueron rescatados. Amani y su marido siguen recuperándose de sus heridas y la familia vive ahora en una tienda de campaña proporcionada por una organización con quien Save the Children colabora. 

"Mi hija ya no duerme. Grita y grita pensando que sigue bajo los escombros. Todavía cree que estamos allí", dice Amani. “Perdimos todas nuestras pertenencias, todo lo que tengo ahora es una manta. Este periodo de recuperación es muy difícil". 

Las familias afectadas por los seísmos también tienen dificultades para acceder a los alimentos debido a la escasez en los mercados y al aumento de los precios de los artículos más demandados. En algunos distritos del norte de Siria gravemente afectados por el seísmo, como Harim, Jandaris y Sheikh Al-Hadid, los mercados informaron de una disponibilidad limitada o nula de alimentos básicos. 

Kathryin Achilles, directora de incidencia política y comunicación de Save the Children Siria, declara: "Se trata de una crisis dentro de otra crisis. Estos terremotos han sacudido zonas en las que los niños y niñas y sus familias ya se enfrentaban a enormes retos como consecuencia de 12 años de conflicto y crisis económica. La mayoría de las familias más afectadas ya se han visto obligadas a huir de sus hogares en múltiples ocasiones y han soportado difíciles condiciones de vida. No hay tiempo que perder, es crucial que ayudemos a las familias sirias a reconstruir sus vidas ahora".  

Carrera contrarreloj para evitar impactos secundarios en Turquía 

En Turquía, la mayoría de las familias desplazadas y que se han quedado sin hogar a causa de los terremotos -unos 2,2 millones de personas- siguen en modo de supervivencia y son incapaces de planificar su futuro inmediato. Cientos de asentamientos, formados por tiendas de campaña o contenedores prefabricados, han sido instalados en Hatay y otras provincias afectadas por el terremoto por familias que no tienen adónde ir.   

Melis, de 35 años, su marido y sus dos hijas viven actualmente en una tienda de campaña en un pueblo de las afueras de Antioquía, después de que su casa quedara reducida a escombros por los terremotos.: "No podemos abandonar nuestro pueblo. Tanto mi marido como yo tenemos aquí nuestros trabajos, así que debemos quedarnos. Por eso nuestro plan principal es mudarnos a un refugio lo antes posible y mantenernos a flote de alguna manera", explica. "No nos queda ningún familiar. Hemos perdido a nuestros amigos más cercanos. No sé cómo serán nuestras vidas. Perdimos la confianza en nosotros mismos y tememos por el futuro de nuestra familia", añade. 

Las continuas réplicas también están impidiendo que regresen a sus casas las personas cuyos hogares no se vieron afectados por los seísmos, lo que está aumentando el número de personas que necesitan refugio y apoyo.  

"Lo que vemos ahora es cada vez más gente reunida en campamentos superpoblados. Cerca de Antioquía, en algunos casos tres o cuatro familias viven en una sola tienda. Muchas no tienen agua potable ni instalaciones para lavar la ropa. Algunas familias nos dijeron que no querían ducharse porque no tenían ropa limpia con la que cambiarse", cuenta Ayse Kocak, responsable de zona de Save the Children en la provincia de Hatay. "Muchos mercados de los distritos de Antioquía siguen sin funcionar, y en algunos faltan alimentos básicos debido a la pérdida de proveedores en la zona, que tradicionalmente era un centro comercial para la provincia de Hatay. Algunas familias nos dijeron que incluso les resulta difícil conseguir harina para hacer su propio pan. Estamos en una carrera contrarreloj para evitar los impactos secundarios de los terremotos”. 

Save the Children en Turquía y Siria 

Save the Children está respondiendo a las consecuencias de los terremotos a través de socios locales, proporcionando ayuda urgente para salvar vidas tanto en Turquía como en Siria. Hasta ahora se ha atendido a más de 165.000 personas con apoyo de emergencia.    

En Turquía, está ayudando a los niños y a sus familias en algunas de las provincias más afectadas, como Hatay y Gaziantep, proporcionando agua, tiendas de campaña, mantas, colchones, pañales, productos sanitarios, calentadores, leña y ropa de abrigo.   

En Siria, está entregando ayuda a través de unos nueve socios locales, respondiendo en las provincias de Idlib, Alepo y Raqqa, y proporcionando raciones de alimentos de emergencia, mantas, tiendas de campaña y ropa de abrigo. Save the Children también se está asegurando de que los niños y sus familias puedan mantenerse limpios, sanos y protegidos de enfermedades mediante el suministro de agua potable y artículos esenciales de higiene y saneamiento.