Un año sin luz en la Cañada Real: Save the Children considera injustificable que niños y niñas continúen sin suministro eléctrico

-La organización pide a las distintas Administraciones competentes que intervengan para que Naturgy restablezca el servicio.

-La bajada de temperaturas podría volver a poner en riesgo a las familias vulnerables.

Madrid, 1 de octubre- Mañana se cumple un año desde el corte del suministro eléctrico en la Cañada Real Galiana, que afecta a 3.400 personas, entre ellas más de 1.000 niños y niñas, una situación inaceptable para Save the Children. La organización solicita al Gobierno, a la Comunidad de Madrid y al Ayuntamiento que intervengan para que Naturgy, la empresa privada concesionaria del suministro eléctrico de la Cañada Real, restablezca la distribución de energía en condiciones justas para todas las familias vulnerables, priorizando a las familias con hijos e hijas por su situación de especial vulnerabilidad.

“Un año después, tras vivir situaciones extremas como la tormenta Filomena en enero sin electricidad con la que poder calentar sus hogares o las olas de calor de este verano sin tener medios para refrigerar alimentos, estos niños, niñas y adolescentes comienzan un nuevo curso en una situación extrema. Seguimos ante una clara vulneración de los derechos fundamentales de la infancia, como el derecho a una vivienda adecuada, a la educación y a la salud, denunciadas también por el Comité de Derechos del Niño y el Defensor del Pueblo”, señala Catalina Perazzo, directora de Incidencia Social y Políticas de Infancia de Save the Children.

Pese a la movilización incesante de las asociaciones vecinales, que han convocado una concentración mañana en la Cañada Real, las soluciones siguen pareciendo lejanas. La puesta en marcha esta semana del Grupo interministerial impulsado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 para dar soluciones integrales a la población de la Cañada Real Galiana de Madrid se plantea como un nuevo espacio de negociación, pero sin voluntad y compromiso no servirá para ofrecer soluciones reales y urgentes para las familias de la Cañada.

“El Gobierno central, el autonómico y el Ayuntamiento tienen la obligación legal de proteger los derechos de los niños y niñas, así como la empresa de electricidad que debe proteger a los consumidores más vulnerables. Creemos que es necesario prohibir los cortes de suministro más allá de la vigencia del escudo social y que se puedan aplicar a todas las situaciones de vulnerabilidad, con atención específica a hogares con presencia de menores, independientemente de la legalidad de los contratos”, concluye Perazzo.

La organización considera prioritario establecer contratos de luz para las familias del sector VI y las que queden sin luz del sector V. A medio plazo,la instalación planificada de paneles solares en estas viviendas permitiría, al menos temporalmente, su  sostenibilidad y autosuficiencia.. Pero a largo plazo, es esencial buscar una solución estructural a la situación de la Cañada, con enfoque de derechos y escuchando las necesidades de las familias y de sus hijos e hijas. Los realojos planteados en Pacto Regional por la Cañada Real deben hacerse en base a los intereses de las familias, y tomando como partida el interés superior de los niños y niñas implicados.

Con el objetivo de aumentar el apoyo social y la presión ante las administraciones implicadas, la organización mantiene activa una recogida de firmas a través de su web para pedir el restablecimiento de la luz en la Cañada Real, a la que ya se han unido más de 42.000 personas.

Sobre Save the Children

Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja desde hace más de 100 años para asegurar que todos los niños y niñas sobreviven, aprenden y están protegidos. Actualmente la organización opera en más de 120 países.

En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. A través de sus programas en España, proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias.