Maputo, 4 de abril. Save the Children calcula que más de 6.000 bebés nacerán este mes en áreas devastadas por el ciclón Idai en Mozambique y, por tanto, tendrán un mayor riesgo de verse afectados por el cólera y la malaria. Los bebés son particularmente susceptibles al cólera y las mujeres embarazadas que lo contraen tienen mayor riesgo de empeorar al dar a luz. Asimismo, las mujeres que enferman de malaria tienen más posibilidades de tener bebés con bajo peso. Ante esta situación, Save the Children asegura que resulta esencial que tanto las mujeres embarazadas como los bebés afectados por el ciclón cuenten con la atención de personal médico cualificado y con centros de salud equipados.
La grave escasez de agua potable ha contribuido al brote de cólera en la ciudad portuaria de Beira, donde se han registrado al menos 1.000 casos confirmados, incluida una muerte, según el Ministerio de Salud. También se ha identificado un repunte de casos de malaria en el interior del país, en la provincia de Manica. La malaria ya es un problema grave y es la principal causa de muerte de niños y niñas menores de cinco años en Mozambique.
“El cólera causa diarrea aguda, que puede matar a una persona adulta en cuestión de horas si no se trata. También es prevenible, con acceso a agua clorada y medidas de saneamiento apropiadas. Además, los métodos simples de rehidratación pueden prevenir las muertes infantiles”, alerta Rachel Cummings, directora del Equipo de Salud Pública Humanitaria de Save the Children en Mozambique.
Save the Children está aumentando su respuesta para frenar el brote de estas enfermedades, después de haber desplegado un helicóptero en la provincia de Manica para entregar mosquiteras, mantas, lonas y bidones a las familias en zonas de difícil acceso. La Unidad de Salud de Emergencia de Save the Children también se ha desplegado y en los próximos días comenzará a proporcionar servicios de atención médica para algunas de las áreas más afectadas.
Miles de familias afectadas
Roda, de 20 años, y su familia llevaban una vida tranquila antes de que el ciclón Idai atravesara su comunidad, destruyendo su hogar y todas sus pertenencias. En las semanas posteriores a la catástrofe, la hija de Roda, Albertina, contrajo malaria. “Antes del ciclón teníamos todo lo necesario. Teníamos ropa y ollas. Sin embargo, cuando llegó el ciclón que arrasó nuestra casa, perdimos todas nuestras cosas en el agua ", cuenta Roda. “Corrimos y trepamos a un árbol, nos quedamos allí hasta el día siguiente. Nos recogieron en un bote y nos llevaron a esta misión [escuela]. No le pasó nada a Albertina durante el ciclón, pero después, mi hija contrajo malaria. Recibió tratamiento y ahora está mejor. Sus síntomas de malaria incluían escalofríos, vómitos y pérdida de apetito", concluye. Save the Children proporcionó a Roda y a su familia un kit de emergencias, que están usando ahora para reducir el riesgo de enfermedades adicionales.
El ciclón Idai tocó tierra hace tres semanas en Mozambique, afectando a aproximadamente 1,85 millones de personas, incluyendo a cerca de 1 millón de niños y niñas. Los vientos e inundaciones dañaron unas 100.000 casas y al menos 35 centros de salud solo en Mozambique, antes de continuar hacia Malawi y Zimbabue, donde Save the Children también está respondiendo a la catástrofe. Miles de madres no pueden acceder a la atención médica prenatal y se enfrentan a la posibilidad de dar a luz en condiciones miserables, con poca protección para sus hijos e hijas.
Como miembro del consorcio COSACA, junto a Oxfam y CARE, y en coordinación con el Gobierno de Mozambique, Save the Children está trabajando para reconstruir escuelas y centros de salud y para prevenir brotes de enfermedades, con acceso a agua potable y buenas prácticas de higiene.
La ONG también está incrementando sus esfuerzos para garantizar la protección de la infancia y ha puesto en pie alrededor de 80 espacios seguros para niños y niñas, donde puedan jugar y recuperarse mientras sus familias reciben información sobre cómo acceder a los servicios para reconstruir sus vidas. En estos espacios, los niños y las niñas también reciben mensajes importantes sobre prácticas de higiene para evitar la propagación del cólera, incluido el lavado de manos, la cobertura de alimentos y la forma de acceder al agua potable limpia.
El objetivo de Save the Children en la zona es ayudar a, por lo menos, 190.000 niños y niñas, así como a sus familias, en las próximas semanas y meses. La organización, a través su fondo de emergencias, está recaudando fondos para poder enviar a terreno toda la ayuda posible.
Sobre Save the Children
Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja desde hace 100 años para asegurar que todos los niños y niñas sobreviven, aprenden y están protegidos. Actualmente la organización opera en más de 120 países.
En España trabaja en programas de atención a los niños y niñas más vulnerables, centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. La organización atiende además a la infancia migrante y está centrada a proteger a los menores frente a la violencia. Save the Children quiere que todos los niños y niñas, independientemente de su condición o país de origen, puedan disfrutar plenamente de sus derechos y alcanzar el máximo de sus capacidades.