Madrid, 6 de agosto de 2018. Esta tarde se ha convocado, tras tres años de ausencia, la Comisión Sectorial de inmigración, donde el Gobierno y las Comunidades Autónomas discutirán sobre la “Situación migratoria en España y líneas de actuación en materia de política de inmigración”.
Save the Children analizaba ya en su informe Los más solos la situación en la que se encuentran los niños, niñas y adolescentes que llegan sin acompañamiento al país, y cómo la ineficacia de políticas migratorias está causando situaciones de absoluta desprotección para este colectivo, ya de por sí en una condición de las más vulnerables. Actualmente hay más de 7.000 menores no acompañados tutelados por el Estado. La concentración de la mayoría del colectivo en las tres comunidades autónomas que representan la principal vía de entrada al país, está poniendo a dura prueba las capacidades de acogida de las mismas, y exponiendo a los jóvenes a situaciones inaceptables.
“Es necesario que se establezca un nuevo compromiso y se mejore la coordinación entre los actores involucrados para garantizar que el aumento en las llegadas no menoscabe la protección y el bienestar de la infancia migrante y refugiada en nuestro país”, reclama Andrés Conde, director general de Save the Children España.
El reparto de competencias que exige el tema de los menores migrantes no acompañados necesita de mecanismos periódicos y específicos que aseguren colaboración, coherencia y reparto de responsabilidades entre los actores implicados: Gobierno central (asuntos extranjería, asilo) y autonómico (protección menores y acceso a servicios).
La organización celebra que se reconozca la asunción de responsabilidad compartida que necesita esta realidad y recuerda algunas de las cuestiones que consideran indispensables en un debate sobre la situación de los niños, niñas y adolescentes migrantes en nuestro país:
- Actualmente existen 19 modelos distintos de protección de menores en España. La heterogeneidad del sistema provoca movimientos secundarios de los niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados, exponiéndoles a riesgos enormes. En el seno de la Conferencia Sectorial deberían adoptarse criterios comunes de cobertura, calidad y accesibilidad, en base a lo dispuesto por la Ley Orgánica de Protección Jurídica del Menor (LOPJM).
- Asimismo, se utilizan criterios muy dispares en los procedimientos de determinación de la edad de los niños y adolescentes que llegan solos, que en muchos casos se realizan sin las adecuadas garantías para los niños.
- La acogida de los niños y niñas debe realizarse cumpliendo con el interés superior del menor y garantizando el derecho a ser escuchado. Eso incluye la consideración de la posible existencia de parientes u otros lazos familiares o personales de los niños y las niñas en algunas CC.AA. para decidir su destino.
- Es necesario introducir criterios específicos que activen de manera automática el Protocolo de Traslados entre Comunidades Autónomas cuando no se cumplen los estándares mencionados anteriormente, con el fin de evitar la saturación de los centros de protección para menores migrantes solos. Ninguna circunstancia justifica la desprotección de los menores ni la disminución de los estándares de acogida.
- La creación de recursos de acogida específicos y especializados para derivar a los niños y niñas solicitantes de protección internacional o que han sido víctimas de la trata de seres humanos que lo necesiten. Así, deberán existir intervenciones específicas para menores con otras necesidades como los que sufren algún tipo de adicción o discapacidad.
Sobre Save the Children
Save the Children lleva trabajando desde 2008 en Italia y los Balcanes con un modelo propio de Espacios Seguros, donde atendemos las necesidades específicas de la infancia y la adolescencia migrante y refugiada.
En España trabaja desde hace más de 20 años con programas de lucha contra la pobreza infantil, la protección frente a la violencia y la atención a infancia migrante y refugiada. Desde 2016, como parte de estos programas de intervención con infancia migrante y refugiada en España, hemos puesto en marcha espacios seguros en zonas fronterizas como la frontera internacional de Melilla donde hemos atendido a más de 2.400 menores. Recientemente colaboramos con las autoridades y otras organizaciones para mejorar los protocolos en la recepción de los menores que llegan a nuestras costas aportando un enfoque de infancia en Frontera Sur.