- En 2024 se produjeron 2.445 ataques contra escuelas frente a los 790 de 2020, lo que supone un aumento de casi el triple, según un nuevo análisis de Save the Children
- Mañana y pasado tendrá lugar la Quinta Conferencia Internacional sobre Escuelas Seguras que persigue garantizar la educación de los niños y niñas durante los conflictos armados. Este encuentro también marca la conmemoración del 10º aniversario de este compromiso global.
Nairobi, 24 de noviembre de 2025- Según un nuevo análisis de Save the Children, el número de ataques contra escuelas, profesorado y alumnado en zonas de conflicto se ha triplicado en los últimos cinco años, a pesar de la declaración mundial de hace una década para proteger la educación en los conflictos armados.
Incluso en la última semana, dos ataques en Nigeria han puesto de relieve la continua vulnerabilidad de las escuelas a los ataques: el viernes, más de 300 niños y niñas y miembros del personal fueron secuestrados en una escuela del centro de Nigeria, y el lunes, más de 20 alumnas fueron secuestradas en un internado del vecino estado de Kebbi.
El análisis de Save the Children de los datos de la ONU, publicado antes de la quinta conferencia internacional sobre la Declaración de Escuelas Seguras en Kenia, mostró que en 2024 (el último año disponible) se produjeron 2.445 ataques contra escuelas, frente a los 790 de 2020, lo que supone un aumento de casi el triple.
Aunque la declaración está contribuyendo a proteger la educación cuando es aplicada por los gobiernos [1], el aumento del número de crisis humanitarias en todo el mundo corre el riesgo de privar a más niños y niñas de su derecho a una educación sin temor a la violencia o los ataques, según la organización.
Los ataques contra escuelas en los últimos cinco años incluyeron asesinatos y secuestros de profesorado y alumnado, ataques aéreos contra escuelas, ocupación de escuelas por grupos armados y violencia sexual contra alumnos y alumnas dentro de las instalaciones educativas.
La Declaración sobre Escuelas Seguras es un compromiso político intergubernamental cuyo objetivo es proteger la educación durante los conflictos armados y, hasta ahora, ha sido firmada por 121 Estados. La conferencia busca movilizar una voluntad política renovada para proteger la educación de los ataques.
El análisis en curso de la Coalición Global para Proteger la Educación, una coalición interinstitucional de organismos de las Naciones Unidas y ONG, entre las que se encuentra Save the Children, que trabaja para proteger la educación durante los conflictos armados, sugiere que los ataques denunciados contra la educación, incluido el uso militar de escuelas y universidades, han seguido aumentando en 2025.
Sudán se enfrenta a una de las peores crisis educativas del mundo tras el estallido del conflicto en abril de 2023, que ha obligado a cerrar la mayoría de las escuelas. Esto ha dejado sin escolarizar a más de tres cuartas partes de los 17 millones de niños y niñas en edad escolar del país, y muchos de ellos tienen cada vez menos posibilidades de completar sus estudios, una crisis que podría afectar al futuro de toda una generación de niños y niñas.
Mientras tanto, en Yemen, 11 años de conflicto han dejado a 3,2 millones de niños y niñas, casi uno de cada tres, sin educación, y al menos 2.400 escuelas (el 15%) han sufrido daños o se han utilizado como refugios para la población desplazada.
Salma, de Taiz (Yemen), era una estudiante de 6 años que cursaba primer grado cuando estalló la guerra en 2015. Su familia fue una de las que no pudo marcharse. “Las clases se suspendieron en toda la ciudad. Las escuelas ya no eran seguras; algunas fueron bombardeadas, otras estaban demasiado cerca del frente, incluida la mía. Estuvimos sin ir a la escuela durante seis meses. Estudiábamos en sótanos para evitar los bombardeos. Las habitaciones eran oscuras, mal ventiladas, sin pupitres, sin colchonetas, sin alfombras... Nos sentábamos en piedras. No había pizarras, así que los profesores dictaban las lecciones. Para nosotros, que éramos niños pequeños, era muy difícil seguir el ritmo de la escritura”, explica Salma.
Salma, que ahora tiene 16 años y está en la escuela secundaria, quiere ser médica: “Mi mensaje a los responsables de la toma de decisiones es que respeten el derecho de los niños y las niñas a la educación y presten seria atención a nuestro futuro proporcionándonos escuelas seguras, protegiéndonos de los conflictos y asegurándose de que podamos aprender en un entorno seguro”.
Save the Children hace un llamamiento a los líderes para que hagan de las escuelas lugares seguros para los niños y las niñas y protejan al alumnado, al profesorado y las escuelas de los ataques durante los conflictos armados, y para que limiten el uso de las escuelas con fines militares.
Duncan Harvey, director nacional de Save the Children Nigeria, afirma: “Mañana, Nigeria se unirá a otros países en la Quinta Conferencia Internacional sobre la Declaración de Escuelas Seguras en Nairobi, Kenia. La conferencia marcará una década de compromiso mundial para proteger la educación durante los conflictos armados y adoptar el Plan de Acción de Nairobi, una hoja de ruta renovada para garantizar que las escuelas sigan siendo refugios seguros para el aprendizaje. Estos últimos secuestros en escuelas de Nigeria deben ser una llamada de atención. Los compromisos sobre el papel no son suficientes; la infancia necesita protección ahora”.
Chantal Mutamuriza, asesora de Save the Children para la defensa de la educación y la ayuda humanitaria, que asistirá a la conferencia en Kenia, señala: “Ningún niño o niña debería tener que elegir entre aprender y seguir con vida. Cuando se ataca una escuela, no solo se derrumban las paredes, sino también la seguridad, los sueños y el futuro de la infancia. En todo el mundo, millones de niños y niñas han visto cómo sus aulas quedaban reducidas a escombros, sus libros cubiertos de polvo o sus escuelas convertidas en refugios mientras huían de la violencia”.
Mutamuriza añade: “Más de 120 gobiernos han respaldado la Declaración sobre Escuelas Seguras. Algunos ya han comenzado a aplicarla con prácticas inspiradoras que demuestran que es posible avanzar. Los niños y las niñas necesitan que se actúe. Todos los Estados deben respaldar y aplicar esta declaración y garantizar la rendición de cuentas cuando se produzcan violaciones relacionadas con la educación. Proteger las escuelas significa proteger el futuro, y cuando no lo hacemos, las consecuencias duran generaciones”.
Sobre Save the Children
Save the Children apoya la educación de la infancia de todo el mundo proporcionando espacios de aprendizaje seguros para aquellos cuyas vidas se han visto destrozadas por los conflictos, donde los niños y niñas también pueden acceder a atención sanitaria, vacunas y apoyo en materia de salud mental. El enfoque de Escuelas Seguras de Save the Children conecta las intervenciones escolares y comunitarias con las políticas, garantizando que quienes viven en situaciones de conflicto puedan configurar su propia protección.
Notas para la edición:
[1] En los 13 países afectados por conflictos que respaldaron la Declaración desde el principio, los incidentes denunciados de uso militar de escuelas y universidades se redujeron a más de la mitad entre 2015 y 2020, pasando de al menos 180 casos a unos 70.